martes, 29 de enero de 2008

Francia a Colombia: "el acuerdo humanitario bien vale un Chávez"

Palacio del Elíseo
Apenas Hugo Chávez sacudió al mundo con la propuesta de retirarle el calificativo de terroristas a la guerrilla colombiana y de declararlas beligerantes, el narco-paramilitar presidente Alvaro Uribe hizo maletas y se marchó al viejo continente a reactivar la mediación de Suiza, España y Francia con miras a un eventual acuerdo humanitario con las Farc-EP.
En el Palacio del Elíseo, Alvarito [así lo llamaba cariñosamente su amigo Pablo Escobar] se aseguró de dejar en claro que a Venezuela bajo ningún concepto se le iba a restituir su papel de pais mediador, desconociendo las voces que le conceden a Hugo Chávez el merito de ser la unica persona en el mundo capaz de lograr la liberación tanto de los rehenes que están en las selvas como de los presos que están en las carceles, victimas - sin duda alguna - todas ellas del conflicto armado que vive Colombia desde hace casi medio siglo.
Nicolas Sarkozy dejó, por unas pocas horas, el idílico edén que comparte con la exquisita y curvilínea Carla Bruni, para recibir a su homólogo colombiano. Para nadie es un secreto que para el huesped del Palacio del Elíseo la liberación de Ingrid Betancourt es una cuestión de honor, por lo que luego de escuchar a Alvarito esgrimir mil razones para desechar la mediación de Chávez, le pidió "no excluir ninguna cooperación para lograr la libertad de los retenidos".
Sarkozy puede ser que esté aletargado por los vapores del amor, puede ser que se esté viendo en los ojos de la voluptuosa Carla, puede ser que esté flotando en las alas de la fantasía, pero su olfato político está alerta... y sabe que Chávez juega un papel estelar no solo en la concresión del acuerdo humanitario sino también en lograr el compromiso de las Farc-EP por allanar, por la parte rebelde, los caminos de la paz.
Eso fue durante el viaje que realizó el presidente colombiano a Europa para defender su parapolítica en contra de la propuesta de Chávez de otorgarle beligerancia de la guerrilla colombiana para aplicarle al conflicto colombiano el Protocolo II de Ginebra. Antes de ayer Francia habló de nuevo en la voz de su canciller, Bernard Kouchner, quién defendió la mediación de Venezuela en el canje humanitario: "Pienso que hay que hacer todo lo posible para lograr la liberación de todos los prisioneros, y por supuesto de Ingrid Betancourt. Hay que utilizar todo". "Si es útil hay que recurrir a eso absolutamente", afirmó el canciller francés acerca de una mediación de Chávez en la liberación de 43 retenidos colombianos en manos de las Farc-EP, entre ellos la política franco-colombiana Ingrid Betancourt.
La voz de Kouchner es la voz de la razón, del sentido común; a la liberación unilateral de Clara Rojas y de Consuelo de Perdomo se suma la confianza que la cadena de mando de las Farc-EP le tiene la mandatario venezolano, es una persona a la que respetan, un interlocutor valido sobretodo si se toma en cuenta que la guerrilla colombiana desconfía de Alvaro Uribe y de su gabinete de guerra.
Tampoco hay que olvidar que tanto las familias de los rehenes civiles como las familias de los guerrilleros presos creen que sólo Chávez podría lograr el canje humanitario, y así se lo han pedido al presidente venezolano, que luche por ellos, inclusive Consuelo de Perdomo en sus primeras palabras a Chávez le pidió seguir con la mediación ["los que se quedan en la selva le mandan a pedir eso, señor presidente, que no baje la guardia"] a toda costa.
Francia lo que ha hecho es recordarle a Uribe y a Colombia que el canje humanitario es un mandato de dignidad que el mundo y los afectados - por el conflicto colombiano - le otorgan a Hugo Chávez mas allá de ideologías o de soberanía.

jueves, 24 de enero de 2008

Martin Luther King Jr... o dos miradas a su Memorial Day.


Joven afrodescendiente que pareciera, con su mirada cargada de rabia contenida, recriminarle al presidente George W. Bush sus políticas guerrerista y anti-minorias en contra de los negros, los latinos y los pobres.




Bill Clinton pareciera mas preocupado por el Caucus del Super Martes - es decir por ser el próximo First Gentleman de los Estados Unidos - que por el sermón del reverendo de la Iglesia de Harlem en honor al desaparecido luchador social y lider religioso de color.

martes, 22 de enero de 2008

La 'Solución Chávez' al conflicto colombiano...

Luego de haberse concretado el primer gesto humanitario en mas de seis años por parte de las guerrillas colombianas, donde resultó ser el factor "X" en la liberación de Clara Rojas y de Consuelo de Perdomo - y en la aparición ante la sociedad del infante Enmanuel -, el presidente Hugo Chávez sorprende al mundo con la siguiente propuesta: retirar a las Farc-EP y al ELN de la lista de grupos terroristas.

"Les pido que comencemos reconociendo a la FARC y al ELN como fuerzas insurgentes de Colombia y no como grupos terroristas. Lo pido a los gobiernos de este continente y a los gobiernos del mundo", dijo Chávez antes de presentar su mensaje anual ante la Asamblea Nacional (AN) venezolana.

Enseguida vino la reacción de la derecha endógena y de la derecha internacional, mas el despliegue noticioso de los medios venezolanos y de las transnacionales de noticias, acusando al presidente venezolano de apoyar a las guerrillas colombianas por sobre el gobierno de Alvaro Uribe... cuando la petición del presidente venezolano no es mas que una propuesta para "continuar buscando fórmulas para lograr la paz en Colombia". Pero "en distintos niveles". Esos niveles pasan por reconocer el gobierno narco-paramilitar de Uribe que el conflicto armado que desangra a Colombia, y a los colombianos, desde hace casi medio siglo, no tiene solución militar sino política; esos niveles pasan por reconocer el gobierno narco-paramilitar de Uribe que un rescate militar de los rehenes supone la condena a la muerte de los mismos; esos niveles pasan por reconocer el gobierno narco-paramilitar de Uribe que la cuestión humanitaria de la guerra escapa de las manos de Colombia para convertirse en un ferviente deseo de la humanidad en pleno; esos niveles de los que habla Chávez pasan porque su colega Uribe entienda que debe enterrar en el pasado su política de guerra y buscar los caminos de esa paz tan esquiva pero tan anhelada a la vez por las familias colombianas.
Ya lo dijo - despues de sostener una entrevista en Caracas con el presidente Chávez - el congresista demócrata William Delahunt, que el conflicto colombiano no tiene solución militar y que la paz en Colombia no es un tema de ideología, esto supongo que lo subrayó debido a que la propuesta de retirarle el calificativo de terroristas a las guerrilas colombianas [y otorgarles el reconocimiento de beligerancia] provino de la figura mas representativa de la izquierda en el continente: Hugo Chávez. Y Delahunt no es Chavista, él es el principal miembro del subcomité de Asuntos Interamericanos de la Cámara de Representanes de los Estados Unidos; él es demócrata, pero sobretodo es un político estadounidense único en su especie, que no odia a Chávez y que lo respeta.

Igualmente otra importante figura política mundial que acaba de respaldar la propuesta de Chávez ha sido el presidente de la cámara de Diputados de Italia, Fausto Bertinotti, quien expresó la necesidad de que Europa y el mundo no pongan trabas a la iniciativa del presidente venezolano de retirar de las listas de "terroristas" a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), pues es de vital importancia alentar toda propuesta para salvar vidas humanas. Pero Bertinotti es comunista, ya puedo escuchar el murmullo a lo lejos.
Es mi humilde opinión que el mundo, como un todo, debe analizar la propuesta venezolana en su justa dimensión, como un mecanismo tendiente a buscar que las partes en conflicto en Colombia se sienten a discutir los caminos de la paz y de la pacificación del país, que sería lo mismo que esa resurrección de Colombia que tanto pregona, con amor bolivariano, Hugo Chávez. En pocas palabras, para decirlo en lenguaje coloquial, que los actores de la guerra de Colombia entierren - de una buena vez y para siempre - el hacha de la guerra y fumen la pipa de la paz.
Al fin y al cabo si la guerra continúa medio siglo más, si siguen secuestrando objetivos políticos y capturando objetivos miltares, las victimas serán colombianas, si siguen muriendo civiles inocentes, los muertos serán colombianos, si siguen muriendo soldados del ejercito regular e insurgentes de las guerrillas, los muertos serán colombianos. Esto configura, mas allá de toda sombra de duda, una guerra fratricida. En Colombia la cultura del terror de las guerrillas no debe prevalecer bajo ningún concepto, pero tampoco es humanamente viable la cultura de la guerra de Uribe y su política de exterminio de los grupos guerrilleros.
Yo me pregunto: si Uribe y su gobierno exterminan a la guerrilla - dejando de lado la cuestión humanitaria, minando los caminos de la paz, cerrando las puertas y ventanas que abren hombres y mujeres comprometidos con la vida como Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Nicolás Sarkozy, el profesor caminante Moncayo, Yolanda Pulecio, Piedad Cordoba - en vez de pacificarla, los 25 o 30 mil guerrilleros a ser hipoteticamente exterminados... ¿no serían lo mismo que 25 o 30 mil colombianos muertos? Otra vez me pregunto: ¿será que el orgullo puede mas que los sentimientos de amor, que el humanismo?
La guerrilla está al margen de la ley, ok. La guerrilla siembra el terror, ok. La guerrilla es inhumana porque secuestra, asesina, vuela oleoductos y torres de electricidad, coloca bombas, ok. Pero entre las labores de un presidente, ademas de gerenciar el poder ejecutivo, está la de asegurar la paz interna y de asegurarse que el derecho a la vida de todos los ciudadanos esté garantizado mediante políticas conducentes a ello. Y si el conflicto armado colombiano no tiene solución militar, si no puede mantener una paz que no sea precaria, Uribe está obligado a buscar esa paz, a mantener un orden interno que mantenga esa paz; a Uribe no lo eligieron los colombianos para hacer la voluntad de la administración Bush - enemiga declarada de la paz colombiana - sino para hacer la voluntad de los colombianos. Y la voluntad de los colombianos es que todos los rehenes en poder de las guerrillas regresen al seno de su hogar, y mas allá de eso quieren la pacificación del país.
Viendo la emoción de Clara Rojas y de Consuelo de Perdomo al recobrar la libertad, yo me pregunto si no es menester hacer lo humanamente posible por multiplicar esa alegría por 44 millones, que son los habitantes del hermano pais. ¿A que si?
En ese sentido de trabajar por la busqueda de la paz, El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, aseguró que si el Gobierno de Colombia le otorga beligerancia a los grupos insurgentes colombianos y éstos la aceptan, "entonces deben quedar regulados según los convenios de Ginebra". "Para que una fuerza insurgente sea beligerante, sea reconocida, no debe usar, por ejemplo, el secuestro como arma de lucha, debe renunciar al secuestro, a los actos terroristas contra la población civil", afirmó Chávez durante la edición 300 de su programa Aló, Presidente, desde el estado Guárico (centro).
El mandatario venezolano explicó que un reconocimiento por parte del Gobierno del presidente Uribe a las guerrillas significaría que "se acepta que es una guerra y que hay dos contendientes", por lo que propuso a las partes no precipitarse y meditar su propuesta.

"Yo hago una propuesta para que se discuta, pero ellos no la quieren discutir, de una vez la condenan, de una vez salen a condenar una idea que es para el debate y no para lanzar piedras de una vez"

Por ningun lado Chávez está diciendo que apoya a las guerrillas como dicen los medios de desinformación venezolanos, que sin rubor alguno construyen la matriz de opinión de que éste Chávez que pide beligerancia para las guerrillas [como propuesta de paz] es el verdadero Chávez que apoya a los grupos guerrilleros y a los movimientos de izquierda del continente en detrimento de los gobiernos democráticos, lo cual es absolutamente falso. Pero claro, son matrices de opinión construidas en base a la descontextualización de las declaraciones de Chávez, con intereses subordinados a la oligarquía nacional y al imperio hegemón.


Pero claro, como lo dice Chávez ha de tener un trasfondo político, un fin inconfesable, una intención insospechada, el odio hacia la figura presidencial hace que por parte de muy pocos - pero poderosos, especialmente propietarios de medios impresos, radiales y televisivos - se dude de su buena fé, se desconfíe de sus buenos oficios.
Pero resulta que personajes no chavistas como Delahunt, Bertinotti, Moncayo, respaldan la 'Solución Chávez' al conflicto armado colombiano. Algo tan básico como cuando nosotros para volver a hermanarnos con nuestros amigos descarriados dejamos de lado los calificativos para volver a mirarnos como amigos y no como enemigos.
El derecho internacional impide tácitamente a un Estado establecer un diálogo con terroristas, eso es lo que le da un respiro legal a Uribe para negarse a establecer un mecanismo consensuado con las guerrillas para el canje humanitario de los rehenes y prisioneros de guerra - en primer lugar - y para la busqueda de la paz. Entonces, Uribe, has ese novísimo gesto altruista y humanitario que te pide Hugo Chávez, para que a las guerrillas colombianas se les aplique el Protocolo II de Ginebra, se regularice la guerra no internacional que vive Colombia y al final todos salgan ganando con una paz impensada para ti pero soñada para todos.
Uribe, atrévete! Mira más a latinoamérica que a los Estados Unidos, ¿ok?